El gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, encabezó la inauguración del nuevo edificio del Instituto Politécnico Formosa “Dr. Alberto Marcelo Zorrilla”, ubicado a la altura del kilómetro 1.190 de la Ruta Nacional N.º 81. La obra, que se convierte en la escuela número 1.536 construida en su gestión, representa un hito estratégico en el fortalecimiento de la educación técnica y la apuesta por el desarrollo productivo provincial.
Durante el acto, Insfrán destacó la importancia de la nueva infraestructura educativa, que albergará cuatro tecnicaturas superiores vinculadas a áreas clave como mecatrónica, desarrollo de software, química industrial y electromecánica. Además, hizo entrega de notebooks para los estudiantes y un vehículo para el transporte de docentes, reforzando el compromiso provincial con el acceso equitativo a la educación.
El mandatario aprovechó la ocasión para cuestionar la paralización de obras nacionales que considera estratégicas para la provincia y para el país. En particular, se refirió al freno en la construcción de la planta de Dioxitek, una obra con un 95% de avance que, según remarcó, es fundamental para el sistema energético nacional. “Tarde o temprano, Dioxitek funcionará en Formosa”, afirmó con firmeza, en un claro mensaje al Gobierno nacional.
“Acá no se rinde nadie”
En la misma línea, Insfrán mencionó otras obras detenidas, como la fábrica de bioinsumos agrícolas, y subrayó que el avance de la ciencia y la tecnología no puede ser ajeno a la defensa de la soberanía nacional. “En Formosa no se rinde nadie”, sentenció.
El nuevo edificio del Instituto abarca 24.500 metros cuadrados intervenidos, con aulas de distintas capacidades, laboratorios de última generación y espacios de formación técnica dotados de tecnología de punta. También incluye un amplio comedor de 570 m², cocina profesional, vestuarios, sanitarios, estacionamiento, enripiado de calles, subestación transformadora, grupo electrógeno, tanques de reserva y un sistema de videovigilancia integral.
El director del Instituto, Horacio Gorostegui, destacó que esta inauguración representa un paso concreto hacia una educación técnica de calidad. “Formamos profesionales, sí, pero por sobre todo queremos formar ciudadanos comprometidos con el destino de la provincia”, afirmó. Además, señaló que el conocimiento debe dejar de ser un privilegio para convertirse en un derecho garantizado por el Estado.
Los estudiantes del IPF cuentan con transporte gratuito, desayuno, almuerzo y computadoras personales. Para quienes provienen del interior provincial, también está disponible la Beca Soberanía Tecnológica, otorgada por la Secretaría de Investigación y Desarrollo Tecnológico.