Pablo Ezequiel Morillo, flamante candidato a diputado provincial por La Libertad Avanza en la segunda sección electoral bonaerense, se convirtió en tendencia luego de que saliera a la luz un antiguo video donde elogia al actual gobernador Axel Kicillof, con quien trabajó durante buena parte de su gestión.
La aparición del material audiovisual, en el que Morillo sostiene que Kicillof tiene condiciones para ser presidente y destaca su formación académica, generó revuelo dentro del oficialismo libertario. El video fue registrado años atrás, durante una entrevista con un medio local de Capitán Sarmiento -ciudad natal del dirigente-, cuando aún formaba parte del equipo de la gobernación provincial.
«Está altamente calificado para ser presidente de la Nación. Es uno de los cuadros políticos más importantes de la Argentina, sin lugar a dudas«, se lo escucha decir a Pablo Morillo en las imágenes, que se viralizaron y generaron un fuerte malestar entre Las Fuerzas del Cielo, las «tropas» digitales de Santiago Caputo que se quedaron sin lugar en las listas.
Furia en Las Fuerzas del Cielo por el video de un candidato de LLA que había elogiado a Axel Kicillof
El episodio reflotó tensiones internas dentro de La Libertad Avanza, particularmente entre los sectores liderados por Santiago Caputo, conocidos como Las Fuerzas del Cielo, desplazado de las decisiones clave y sin ningún lugar en las listas, y el grupo con base territorial que encabeza Sebastián Pareja, quien junto a Eduardo «Lule» Menem consolidó su influencia en el cierre de listas bajo la órbita directa de Karina Milei.
Morillo, abogado de 38 años, fue promovido por Pareja, con quien tiene vínculos desde la gestión de Mauricio Macri. Se conocieron en el Registro Nacional de las Personas (RENAPER) y mantuvieron una relación fluida que se prolongó durante años. Luego, a través de un contacto cercano, Morillo fue convocado a trabajar en la administración bonaerense, primero bajo el gobierno de María Eugenia Vidal y, más tarde, con el arribo del Frente de Todos al poder.
En ese lapso, Morillo continuó su militancia libertaria por fuera de su función pública. «Empezó a trabajar con nosotros mientras todavía estaba en la gobernación», señalaron desde LLA, justificando su doble rol en los últimos años. Su participación, afirmaron, fue clave en los armados electorales de 2021 y 2023, donde cumplió tareas de planificación sin figurar en fotos por su cargo provincial.
La aparición de las imágenes es vista como una represalia de los sectores marginados contra la cúpula que lidera Pareja. Desde el entorno de Pareja intentaron minimizar el hecho, argumentando que la entrevista es antigua y que Morillo, como empleado provincial en ese momento, «no podía decir cualquier cosa». Aseguran que, pese a ello, ya militaba para los libertarios.
Actualmente, Morillo es afiliado a La Libertad Avanza, integra la Junta Electoral del partido y goza de la confianza del núcleo más estrecho del oficialismo. De hecho, aunque inicialmente se pensó ubicarlo en el sexto lugar de la lista, finalmente se le reservó el segundo puesto para asegurar su ingreso a la Legislatura.
Su paso por la gobernación bonaerense
Su paso por la gobernación de Kicillof no estuvo exento de tensiones. Según relatan fuentes cercanas, en una ocasión sufrió una supuesta «persecución política» cuando, tras visitar a Pareja en su nuevo despacho en la gestión libertaria, le robaron su computadora y fue acusado penalmente por el hecho desde el gobierno bonaerense. En la administración provincial ocupaba el cargo de director de Logística y Servicios Auxiliares, al que renunció formalmente el 1º de enero de 2024.
Poco después, asumió un rol en la Secretaría de Desarrollo Territorial, Hábitat y Vivienda del gobierno nacional, con un nombramiento inicialmente por 180 días que fue renovado en abril.
Cercanos al candidato buscaron relativizar el impacto del video viral. Aseguran que se trató de una declaración realizada al comienzo del mandato de Kicillof, en un contexto en el que Morillo no hacía política activa y respondía institucionalmente como empleado del Estado. «No estaba en juego Javier Milei todavía. Y en ese momento, hablar bien del gobernador era parte de su responsabilidad funcional», explicaron desde el entorno.
También trascendió un viejo intercambio con Pareja en redes sociales, en el que Morillo le escribía «de peronista a peronista», lo que fue leído como una muestra de su pasado político. Sin embargo, en el oficialismo minimizaron esas referencias: «Acá se arranca de cero. Nadie nació libertario, y nadie se viene de un repollo».