La segunda audiencia del proceso legal contra Claudio Contardi continúa con más testimonios.
El juicio oral contra Claudio Contardi, el exmarido de Julieta Prandi que está acusado de abuso sexual con acceso carnal agravado, continúa este jueves con nuevos testimonios.
“No hay condena que valga por los años de vida que me robó”, aseguró la modelo al llegar a tribunales este mediodía.
La actriz le respondió a Claudio Contardi, quien unos minutos antes había defendido su inocencia ante los medios. “No tengo ninguna intención de cruzármelo ni de escuchar su voz”, agregó.
“Que pruebe que es inocente, que haga las pericias. Él terminó de condenarse cuando dijo ´nunca abusé de ella sin su consentimiento´“, respondió.
Sobre el fallido que tuvo el empresario, aseguró: “Lo tomé como justicia divina, porque lo traicionó su inconsciente y lo celebro”.
Prandi anticipó que volverá a hablar en la etapa de alegatos finales, que se realizará este viernes por la mañana en los Tribunales de Campana.
Esta tarde declarará por Zoom su pareja, Emanuel Ortega. “Él llegó a mi vida en el 2020, yo vivía en un 2×2 con mis hijos, alquilado. Vivía una atrocidad tras otra con mis hijos”, dijo.
“Creo que voy a estar mucho mejor, los recuerdos van a quedar, las cictarices quedan. Hoy por hoy estoy más entera, soy otra persona. No soy la misma que no podía ni pensar ni decidir”, planteó.
Por último, cerró: “Uno habla cuando puede, yo tenía dos criaturas y me provocaba una vergüenza. No lo hubiese hecho si no sentía que era necesario defender a mis hijos”.
La segunda audiencia del proceso legal tuvo que pasar a un cuarto intermedio cuando declaraba una amiga íntima de la actriz y luego de varios minutos se retomó la declaración.
“Es una testigo clave, estaba declarando muy bien. Son esos azares de la vida, quiero pensar que no es otra maniobra para dilatar el juicio”, dijo Javier Baños, abogado de Julieta Prandi.
El abogado de la víctima agregó que Verónica, la amiga de Prandi, contó que cuando se juntaba a dialogar con la actriz “se le sentaban al lado el piletero, el marido y la carcelera”.
En ese contexto, planteó: “¿Qué tipo de conversación o de intimidad podés tener con tu amiga si todos se sientan a escuchar tu charla?“.
Este viernes también declaró Ángel Pelozo, el encargado de seguridad del barrio cerrado Septiembre, donde la actriz vivía con Claudio Contardi.
“Explicó que cada vez que entraba y salía Julieta del barrio cerrado, lo hacía acompañada por el marido o en un auto con un chofer. Corrobora lo que viene diciendo Julieta desde hace cinco años”, señaló Baños.
Tras el cuarto intermedio por la interrupción y la declaración de Pelozo, fue el turno de Bárbara Tomasich, perito oficial.
“La peritada presentó momentos de alto grado de angustia, no tuvo fisuras ni contradicciones. Se advirtieron indicadores consistentes en abusos y violencia de género”, declaró ante el Tribunal.
Además, se refirió a las secuelas que le dejaron las agresiones: “Cuando una víctima se ve sometida sistemáticamente a situaciones traumáticas, ese desgaste de estar expuesta, no solo ella, sino también sus hijos, genera manifestaciones que son síntomas visibles.
El crudo testimonio de Julieta Prandi contra su exmarido
En su declaración, la actriz contó que conoció a Contardi en 2005 y que se reencontró con él en 2008. Sin embargo, dijo que los problemas empezaron tras la llegada de su primer hijo. “Cuando nació Mateo empezaron las agresiones verbales. Todo lo que le pasa a una mujer en esos primeros días es muy difícil, y yo lo viví en el peor contexto”.
Uno de los aspectos más graves de su testimonio fue cuando describió que, según sus palabras, los abusos sexuales comenzaron mientras dormía. “Era parte de su modus operandi”, dijo Prandi entre lágrimas.
A su vez, contó cómo fueron las maniobras de aislamiento y control a las que fue sometida: “Me cortó el módem, me dejó incomunicada. Me escondió el celular en el freezer”. Incluso, detalló que era vigilada por personas de confianza de Contardi, a quienes él contrataba para que le pasaran reportes sobre sus movimientos. “Lorena era mi carcelera. Pasaba informe de todo lo que hacía”, manifestó.
Julieta también contó cómo planificó durante un año escaparse de su propia casa. “El 14 de febrero de 2019 fui libre. Me costó un año poder irme de mi casa, planeándolo en secreto, porque si pedía el divorcio en Escobar no tenía a nadie a quien acudir”, explicó.
Finalmente, logró mudarse a Martínez, pero no sin antes ser amenazada nuevamente: “Primero me dijo que me iba a matar a mí. Después dijo que iba a matar a mis hijos. ‘Hasta que no me des la mitad de todo esto, no te vas de acá’. Eso me dijo”.
Sobre el final de su declaración, Prandi reveló que nunca quiso hacer pública su historia: “No pensaba hacer la denuncia. Me daba vergüenza, asco, y no quería exponerme a que todo el mundo supiera lo que viví. Pero llegó un momento en que ya no podía más”.
Tras la primera audiencia, la conductora afirmó que se sintió “aliviada” después de declarar y pidió una “condena ejemplar”. “La pena máxima es de 50 años. Con 20, 30 años me quedo contenta. Vamos a ver que dice ahora el Tribunal”, sostuvo.
“Estoy satisfecha, siento que es muy difícil. Como que es meter un planeta en un embudo contar todo lo que yo viví en un ratito y que se puedan imaginar todo lo vivido. Creo que pude decir un montón”, dijo ante los periodistas que la esperaban en la puerta del tribunal.