Como era de esperar, la dura derrota ante River en el Monumental trajo consecuencias. Por decisión de Juan Román Riquelme y del Consejo de Fútbol, Fernando Gago dejó de ser el entrenador de Boca. El mal planteo del primer tiempo, la postura defensiva y la derrota final fueron demasiado para un DT que nunca había logrado recuperar el crédito tras la dura eliminación ante Alianza Lima en la Fase 2 de la Copa Libertadores.
Si bien no es el momento ideal, dado que solo resta un partido de la fase regular del Torneo Apertura antes de comenzar los playoffs, la dirigencia perdió su confianza en el DT y ya no creen que haya manera de poder revertir esta situación. El partido a partido que se instaló tras la caída ante el equipo de Néstor Gorosito llegó a su límite con la derrota en el superclásico.
Su ciclo cargaba con la cruz de haberse quedado afuera de toda competencia sudamericana, pero había podido mejorar la imagen con ocho victorias en nueve partidos, que lo había elevado al primer puesto de la Zona A.